HIJOLE MI CUATE

Un “asesino” de arqueros transita por las calles más bravas del primer puerto. Delgado, mediana estatura, cara de inocente, tiene acento mexicano y el grito de gol en los labios. Su nombre es Jonathan Jáuregui. Si lo ve por las calles, no lo denuncie, solo pídale su teléfono porque puede ser una buena contratación para su equipo.

Jonathan, los defensas no te agarran ni en moto…Es que trabajo mucho la potencia de mis piernas. Después de un entrenamiento, almuerzo, luego descanso un par de horas y de allí al gimnasio.

¿Eres “sangre fría” en el área?
Solo deseo lo mejor para el equipo. Se me fue un gol en el primer tiempo y estaba con ganas de hacerme presente en el marcador.

¿Extrañas a la familia?
A veces, recuerdo a mis padres y siento nostalgia, pero si estoy acá es porque quiero hacer lo que me gusta y me siento un privilegiado.

¿Y ya te mueves solito por los barrios del Callao?
Vivo en un hotel de la avenida La Marina y me voy a “Ciudad del Pescador” o al estadio “Miguel Grau” caminando, conociendo las calles.

¿Y si te “cogotean”?
Por si acaso, soy de barrio. He vivido en Veracruz y allí hay muchos asaltantes que te sacan la pistola en cualquier momento.

A propósito, ¿manejas tu “nave” de dos ruedas?
Me encanta. Soy fanático de la motocicleta. Las domino muy bien, sobre todo las areneras.

¿Y en el equipo te dicen “Chavo”?
No, “Chilindrina”, así me decía “Kukín”. Otros me llaman “Charro” y Mario Gómez me dice “Cuate”.

Tu país es famoso por sus telenovelas, ¿a qué compañero lo llevarías a trabajar de galán?
A “Nacho” Drago, está “arreglado” como dicen acá.

¿Ya comiste cebiche?
Sí. Me pareció muy rico, bastante picante como le gusta a los mexicanos.

¿Casado?
Tengo 23 años y una novia que es psicóloga. Somos pareja hace ocho años. Ya me está pidiendo matrimonio, pero le digo que hay que esperar. Mi sueño es consolidarme en Perú y luego vendrá todo lo mejor.

¿Qué es lo que más te sorprendió del puerto?
La alegría de su gente y el lugar que el equipo se ubica en la tabla. Tiene grandes jugadores como Paulo Albarracín y Carlos Elías, por citar solo algunos.
Dicen las malas lenguas que tienes tu “novia” en el club.
Ja, ja, ja. Así dicen los compañeros, que soy el “esposo” de Víctor Anchante.

¿Y quién es el hombre?
Yo, por supuesto, ja, ja, ja.
Manco tiene su frase: “Tócame que soy realidad”, ¿cuál es la tuya?
“Sigue la luz de tus estrellas”. Es que me gusta ser positivo y creer más en lo espiritual que en lo material.

¿Vas a fiestas?
No, prefiero no salir. Las horas libres me meto a la computadora y chateo con mi familia.

Ojalá no cambies y sigas siendo el mismo…
No se preocupe “mano”. Un gol no te hace mejor o peor persona. Siempre que me busquen estaré allí para conversar y conocer el Callao por dentro, como lo hemos hecho para esta entrevista.